Luego, la situación económica de sus caritativos nuevos dueños colocó en gran riesgo la nutrición de esta perrita y sus hijos, entonces APRA le encontró un nuevo amo.
La Cholita (así había sido bautizada) pasó a ser SOFI y se cambió de casa. Luego vino la difícil tarea de encontrar casa para sus cachorros (8, ya que uno murió).
El final de la historia es feliz y un ejemplo de amor. Los hijos de SOFI tienen a muy buenas personas que los cuidan, alimentan y dan amor.... pero faltaba cumplir nuestra promesa:
APRA operó a la SOFI y ella está en perfectas condiciones, esterilizada y muy feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario